Hoy más que nunca el cuidado de nuestro planeta es una prioridad para la mayoría de las naciones y sus pueblos. Los caminos para lograr una sociedad más sustentable que genere mayores beneficios sociales y económicos sin agotar los recursos no renovables que disponemos, son diversos. Pero para un grupo multidisciplinario de científicos y arquitectos liderados por Alfredo Muñoz, pensar en Marte y diseñar su primera ciudad en el Futuverso nos obliga a maximizar los recursos para sobrevivir en un entorno hostil, que, al mismo tiempo nos permite crear soluciones efectivas para el cuidado de la tierra.

Marte
Créditos: ABIBBO Studio

El proyecto se llama Nüwa y es el primer paso iniciado por ABIBOO Studio para crear Onteco Mars, un Futuverso en el Planeta Rojo basado en la ciencia. Onteco Mars busca generar una réplica digital e inmersiva de futuros asentamientos en Marte. El diseño de esta ciudad marciana consideró sus condiciones atmosféricas de un tercio a la de la tierra, las radiación solar y cósmica, las tormentas de arena, etc., por lo que se determinó que el mejor lugar para construirla sería la ladera de un acantilado en la zona de Tempe Mensa, ubicado en el hemisferio norte del planeta rojo.

Lo más importante de diseñar el futuro de estos asentamientos humanos en Marte está en que todo el concepto ha sido construido con bases científicas, no son ocurrencias de la imaginación de entusiastas del espacio, sino producto del trabajo colaborativo entre destacados expertos de disciplinas tan diversas como la Astrofísica, Arquitectura, Astrobiología, Ingeniería Espacial, Astrogeología, Psicología, Biología y Químicas, entre otros campos. El propósito es aprovechar la tecnología inmersiva del Futuverso para crear un gemelo digital de un entorno destinado a existir para 2100 en el cual se tiene proyectado albergará a 1 millón de personas, con las aportaciones, ideas y expertis de mujeres y hombres vinculados o no, a la industria espacial.

Créditos: ABIBBO Studio

La ciudad Nüwa es una compleja estructura arquitectónica vertical incrustada en un acantilado, con módulos divididos en zonas habitacionales, laborales, recreativas y, que contará con sistemas de producción de comida, aire y agua. Todo el complejo estará interconectado por una red de tridimensional de túneles, elevadores y trenes subterráneos de alta velocidad que se encargaran de la movilidad de personas y mercancías. También incluyen zonas verdes o huertos urbanos, jardines comunitarios con animales y agua destinados a proporcionar bienestar físico y mental a los habitantes.

Créditos: ABIBBO Studio

En la meseta del acantilado se tendrá infraestructura para la producción de vegetación endémica marciana, producción de energía y diversos procesos industriales como la construcción in situ, claves para la sustentabilidad de la vida en el planeta rojo. Por el contrario, en el Valle del acantilado habrá hospitales, escuelas y universidades, actividades deportivas, culturales, zonas comerciales y tren que comunica con el transbordador espacial. En síntesis es llevar a máximo nivel de exigencia la innovación e investigación científica para validar las técnicas que permitirán hacer viable la vida fuera de la tierra pero, con el conocimiento adquirido, se podrá avanzar de forma más eficaz en las soluciones que requiere la tierra, transitar a un mejor aprovechamiento de nuestros recursos naturales, generar mayor valor económico para todos y gozar de beneficios en salud, alimentación, movilidad, construcción y diversos procesos industriales que no serían posibles, sin el avance de la industria espacial.

Si te surgieron preguntas y tienes curiosidad o interés por descubrir cómo tu empresa o industria podría aprovechar el conocimiento de la industria espacial, no dudes en contactarnos, envíanos un correo a spaceisbusiness@dereum.mx

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